El restaurante ofrece cocina vasca creativa en un ambiente rústico chic.
El restaurante está ubicado en un antiguo almacén de sal en Bilbao.
Los clientes destacan que el restaurante tiene un ambiente tranquilo, con luz tenue y paredes de piedra vista, lo que crea un ambiente acogedor para disfrutar de las elaboraciones con alma.
Los clientes recomiendan el Tataki, la Burrata, el Bacalao confitado, las gyozas de txipis, el huevo con trufa y hongos, y la torrija, destacando su sabor y presentación.
El restaurante tiene en cuenta las restricciones alimentarias de los clientes, como la intolerancia al gluten, y ofrece estacionamiento cercano para mayor comodidad.